El hombre que vendía la suerte.
Un hombre de apariencia bastante descuidada, se encontraba en la plaza pública de Timer. Allí vociferaba a los transeúntes:
– ¡Vendo la suerte! ¡Llévala, por cinco monedas! ¡Lleva la suerte!
Se encontraba cercano un joven filósofo, que acercándose al hombre le dijo:
– ¿Cómo es posible que usted venda la suerte a otros si ni siquiera cuenta con ella en su vida?
El desgarbado hombre bajó su cabeza, además de dejar de vociferar. Joven, tiene usted razón, no puedo dar a otros de lo que no tengo – respondió con tono reflexivo-, pero su pregunta ¡Cuánta suerte trae hoy a mi vida!
El filósofo tomó su rumbo, y el hombre de la suerte ya la llevaba consigo.
Reflexiones:
– No podemos darle a otros aquello que no tenemos, aquello en lo que no hemos madurado o progresado; el optimista brinda optimismo; el exitoso contagia el éxitos; el espiritual inspira a otros; la bondad motiva más actos de bondad. De igual manera lo negativo engendra lo negativo, y esto conduce a un callejón sin salida: el auto-engaño.
– La suerte está en el trabajo diligente, en un proyecto de vida adecuado, real; la suerte está en el esfuerzo inteligente, en la persistencia por aquellas metas nobles, que producirán su fruto en el momento preciso.
– Cada persona puede desarrollar un proyecto o plan de vida, el cual, si está orientado al bien, producirá frutos importantes para quienes le rodean o para la misma humanidad. Por lo demás, Dios siempre apoyará las buenas causas.
REFLEXIONES DE SUPERACIÓN
- La vasija agrietada
- No detengas tu paso
- La piedra en el camino
- No abras la herida que ya cicatrizó
- Es mejor retirarse y dejar un bonito recuerdo
- Abre tu corazón a nivel físico, mental y espiritual
Anónimo
me encantan estas reflexiones
Anónimo
pues yo no le entendi
Anónimo
Yo tampoco
Anónimo
Abre tu mente y tu corazón y entenderas
Anónimo
Estas refleciones son de mucha bendicion
Anónimo
me encanto es para reflexionar
LILLY MENDOZA
Muy Bella reflexion gracias por compartir
Anónimo
Asi es todo es la actitud y la perseverancia.Y por supuesto la fe en Dios.
Anónimo
Exelente!! Es una parabola , para reflexionar, no se puede dar lo que no se tiene
Anónimo
Entonces si no deseamos suerte a Los otros, aunque nuestra vida no sea perfecta. Que deseamos?, al menos intentamos que el otro la tenga.