Ponte en los zapatos de tu adversario.
La vida suele ser como una prenda de vestir, cada persona se amolda a lo que le concierne vivir; no podemos pretender mover las fichas que no nos corresponde jugar y dejar de lado las nuestras, corriendo el riesgo de perder la partida y fracasar, tan solo porque nunca valoramos lo que tuvimos y solo estuvimos pendientes de lo que hacían o dejaban de hacer los demás, para comparar y quejarnos, sentir envidia o renegar.
Por eso, antes de burlarnos, criticar, condenar o señalar; hay que saber ponerse por un instante en los zapatos de los demás, para entender lo que viven, sienten y piensan; sin pretender nunca saberlo así no más, porque es imposible penetrar a lo más profundo del ser , el alma es el lugar sagrado al cual no todo el mundo sabe llegar.
Ponerse en los zapatos del otro, ayuda a vivir la solidaridad, a ser más tolerantes y comprensivos, y construir fraternidad; porque sabiendo lo que el otro vive, sin sentir envidia, ni comparar ni juzgar; nos ayuda a no hacerle a los demás lo que no queremos que nos hagan…
También se fortalecen los lazos de amistad, se permite que surja la confianza, que nos valoremos unos a otros y que así logremos alcanzar la verdadera paz.
REFLEXIONES DE LA VIDA
- ¿ Qué es Utopía ?
- Evita disgustos
- Sabiduría canina
- Una vida para escoger
- Los sueños son la meta
- Quien me pierde jamás vuelve a encontrarme